¿Cómo afecta la desescalada a los estancos?
El Boletín Oficial del Estado del pasado 3 de mayo recogía la orden SND/388/2020, de 3 de mayo, por la que se establecen las condiciones para la apertura al público de determinados comercios y servicios, y la apertura de archivos, así como para la práctica del deporte profesional y federado. Es decir, en España comienza la desescalada y el gobierno lanzaba una serie de medidas y recomendaciones dirigidas a los locales de comercio minorista que a partir de esa fecha podían empezar a abrir.
Si bien los estancos han permanecido abiertos a lo largo de estas semanas de estado de alarma, esta orden viene a completar tanto las medidas higiénico – sanitarias que deben tener en cuenta todos los locales comerciales (incluidos también las expendedurías de tabaco). En el caso de los estancos, reitera la importancia de mantener algunas de las medidas que ya veían aplicando y añade alguna más que a partir de ahora será obligatoria de cara a la apertura al público y al desarrollo de las llamadas fases de la desescalada.
Por concretar, los estancos deben prepararse de forma externa (con el cuidado y mantenimiento higiénico del local para la atención al público), así como de forma externa (de cara al equipo de trabajo del propio estanco).
Medidas para los trabajadores del estanco
En caso de que el estanco tenga personal, deberá controlar el horario de los trabajadores de manera que sea capaz de mantener la salud y la seguridad de los mismos, evitando métodos de fichaje por huella, por ejemplo y en caso de tener este tipo de mecanismo de control, desinfectando el mismo antes y después de cada uso.
Esta necesidad de desinfección también afecta a herramientas de trabajo como ordenadores, teclados o incluso datáfonos, máxime si además estamos hablando de dispositivos táctiles, porque asimismo deberán ser desinfectados antes y después de cada uso.
Al menos, dos veces al día, el interior del estanco también deberá ser desinfectado. Y la ropa que lleve todo el personal o, en su caso, los uniformes, deberán ser lavados a temperatura de entre 60 y 90 grados para poder desinfectarla correctamente también.
Si un trabajador empezara a tener síntomas compatibles con la enfermedad, tiene la obligación de informar y se contactará de inmediato con el teléfono habilitado para ello por la comunidad autónoma o centro de salud correspondiente. El trabajador deberá abandonar su puesto de trabajo hasta que su situación médica sea valorada por un profesional sanitario.
Medidas para proveedores y clientes del estanco
Se controlará el acceso al estanco, tratando de evitar que dentro del establecimiento haya más clientes que empleados y pidiendo a los clientes que esperen en el exterior del estanco su vez para entrar. Cada empleado del estanco atenderá un único cliente, con la debida separación física prevista, mediante la instalación en los mostradores de mamparas protectoras de metacrilato, por ejemplo. En caso de que no sea posible que empleado y cliente mantengan una distancia de seguridad de al menos dos metros, será obligatorio el uso de elementos protectores como guantes y mascarillas.
El estanquero podría marcar en el suelo las distancias exigidas para los clientes e incluso colocar carteles informativos dentro y fuera del establecimiento, que indiquen cuáles son las medidas que se han tomado para que la compra en el interior del local se efectúe con el mayor número de condiciones de seguridad posibles.
Además, el tiempo de permanencia en el estanco será el estrictamente necesario para que los clientes puedan recibir la prestación del servicio.
Para la desinfección del local se podrían emplear sistemas de ozonificación e ionificación cada cierto tiempo, si fuera posible al cierre del estanco. Y para la limpieza de los dispositivos, herramientas de trabajo y mostradores, se deberá utilizar una dilución de lejía con agua u otro tipo de productos desinfectantes.
Como novedad respecto a las medidas que se vienen tomando desde el comienzo del estado de alarma, a partir de ahora, los clientes del estanco deberán tener a su disposición, a la entrada al local, dispensadores de geles hidroalcohólicos con actividad virucida autorizados., para que puedan higienizarse las manos.
Será obligatorio disponer de papeleras, a ser posible con tapa y pedal, en los que poder depositar pañuelos y cualquier otro material desechable, que además serán higienizadas al menos una vez al día.
Los proveedores que presten servicios en el estanco, ya sea con carácter habitual o de forma puntual, también tendrán que portar material de protección individual.
No se permitirá el acceso a los aseos del estanco a ningún cliente o proveedor, salvo en casos estrictamente necesarios.
En cualquier caso, el estanco deberá contemplar que toda medida de higiene y seguridad a implantar en su establecimiento es poca comparado con el riesgo de contagio que podría darse de no poner en marcha ninguna. Sobra decir que el coronavirus es un virus de contacto por lo que manos, superficies y demás elementos que podamos tocar dentro del estanco deberán estar siempre más que limpias.
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